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¿Qué es la esencia?


La esencia es lo que constituye la naturaleza de las cosas, lo que no cambia de ellas. También se dice que es lo que hace que una cosa sea tal cosa.

El creador de este concepto fue Aristóteles, sin embargo la palabra 'Essentia', de la que deriva 'esencia', fue acuñada por alguno de los traductores Romanos que debieron pasar al latín los textos del filósofo griego.

Aristóteles establece una firme relación entre la 'esencia' y la 'definición': "una definición es una descripción que significa una esencia" y liga ambos conceptos al de predicado: "la esencia de una cosa es lo que se dice que es con respecto a sí misma."

Es importante destacar que, para Aristóteles, uno define cosas y no palabras. La definición de tigre no nos dice el significado de la palabra 'tigre'; nos dice lo que es ser un tigre, lo que un tigre se dice que es con respecto a sí mismo. De esta forma, la definición de tigre establece la esencia del tigre, lo que es predicado del tigre.

Generalmente se opone la palabra 'accidente' a 'esencia'. Esto implica que lo esencial se contrapone a lo accidental. En filosofía, la palabra 'accidente' fue definida por Aristóteles como aquello que pertenece a una cosa, pero no de un modo necesario y constante.

El estudio de la esencia siempre ha sido importante en la historia de la filosofía.

Platón y Aristóteles


Cuando Platón tenía sesenta años, un joven de diecisiete se le presentó. Su nombre era Aristóteles y se destacaba, entre otras cosas, por su seguridad, intelecto, y ambición personal. Muy pronto pasó a formar parte del selecto grupo de aprendices de Platón.

Era tal el poder intelectual de este adolescente que, en una ocasión, Platón llegó a denominarlo "La Mente de la Escuela", sin embargo, como veremos a continuación, Platón y Aristóteles estuvieron lejos de estar en concordancia en sus ideas filosóficas.

Durante el siglo XI, al producirse un redescubrimiento de los textos de Aristóteles en el mundo occidental, su doctrina de las Formas fue el motivo de la división de la filosofía en dos enormes ramas, la aristotélica y la platónica.

La rama platónica se denomina Realismo Extremo. Establece que los conceptos universales tienen una existencia real e independiente de los objetos particulares. Según esta doctrina las Ideas son realidades independientes. Platón enseñó que "más allá de las existencias finitas y causas secundarias, todas las leyes, ideas y principios, hay una inteligencia o Mente, el primer principio de todos los principios, la Idea sobre la cual todas las otras ideas están basadas, (...) la substancia última de la cual todas las cosas derivan su ser y esencia, la causa primera y eficiente de todo el orden y harmonía y belleza que impregna el Universo." Esto es lo que denominó "El Mundo de las Ideas."

La rama aristotélica se corresponde con el Nominalismo. Se trata de una doctrina que afirma que las abstracciones, también conocidas como universales, no poseen una existencia real: sólo los objetos individuales la poseen. Aristóteles escribió extensamente criticando la doctrina de las Ideas de Platón, afirmando que "no existen universales sobre y por encima de los objetos individuales y separados de ellos." Le rechazó cualquier realidad substancial a "la unidad que es predicado de muchas cosas individuales." Los principios universales, sostuvo, son reales, y son los objetos de nuestra razón, a diferencia de los objetos físicos percibidos por los sentidos. Los universales son reales sólo en tanto existen en los individuos. Aristóteles afirmó que "es aparentemente imposible que cualquiera de los así llamados universales pueda existir como substancia."

A la rama platónica se la asocia con el misticismo, mientras que la aristotélica está unida a la razón y a la ciencia. Esta división en la filosofía sigue teniendo una fuerte vigencia.